16 de desembre 2006

L'ombra de Caín

Aquest dijous assistia a la presentació del llibre de Joan Solana, “L’ombra de Caín” guanyador del Premi Ciutat de Badalona de Narrativa-Premi Països Catalans-Solstici d’Estiu, "literatura de debò" com va dir Julià de Jodar, que ens submergeix en l’atmosfera de la nostra Guerra Civil i el desastre que això va suposar per al seu protagonista, en Carles Guàrdia. Tanmateix, no era conscient que l’ombra de Caín ens ronda ben a prop. Anit em vaig adonar que al costat nostre també hi podem tenir "l’ou de la serp" que engendra l’odi i que alleta els petits dictadors, als partidaris del pensament únic, als violents que eliminarien al que pensa diferent, als que “envisten cuando se dignan a usar la cabeza” com deia Antonio Machado.

Per mostrar el meu rebuig a tot això, he dubtat de si utilitzar el versos de Blas de Otero, “Pido la paz y la palabra”, però en el fons és un poema massa optimista. He triat un poema de Gil de Biedma que, sense deixar de ser optimista, té el punt de rebel·lia que jo i molts més no volem perdre mai.

Per a en Joan Carles i els altres companys (Lluís, Josep, Miguel, Marcos, Rosa, “los manolos”, Roser, Eduardo, Santi, Pilar, Javi, Alonso, Antonio, Juan, ... i tants i tants altres), i per a tots els “Abels” quotidians:

POR LO VISTO

Por lo visto es posible declararse hombre,
Por lo visto es posible decir NO,
De una vez y en la calle, de una vez, por todos,
Y por todas las veces en que no pudimos.

Importa por lo visto el hecho de estar vivo.
Importa por lo visto que hasta la injusta fuerza
Necesite, suponga nuestras vidas, esos actos mínimos
A diario cumplidos en la calle por todos.

Y será preciso no olvidar la lección:
Saber, a cada instante, que en el gesto que hacemos
Hay un arma escondida, saber que estamos vivos
Aún. Y que la vida
todavía es posible, por lo visto.

3 comentaris:

Anònim ha dit...

Nada que un hombre haga lo envilece más que el permitirse care tan bajo como para odiar a alguien.
Martin.L.King

Cuando nuestro odio es demasiado profundo, nos coloca por debajo de aquellos a quienes odiamos.
Francois de la Rochefoucauld

Anònim ha dit...

No es ser demasiado optimista pedir la paz y la palabra como expresaba Blas Otero en sus versos.

visto lo visto

por lo visto, es imposible declararse hombre (sin tener que demostrarlo usando la fuerza).

Por lo visto, es imposible decir NO (a quien no entiende que la diversidad de pensamiento lejos de ser un problema es muy al contrario una riqueza colectiva).

Y si, es muy importante el estar vivo,y compartir espacios con los que en eso que llaman el tren de la vida, desean viajar junto a nosotros empleando la unica arma con la que no se puede traficar, esa que llaman LA PALABRA.

Miguel.

Anònim ha dit...

Hombres y palabras, entre otros poetas, José Agustín Goytisolo tiene un bello poema,
EN ESTE MISMO INSTANTE...

En este mismo instante
hay un hombre que sufre,
un hombre torturado
tan sólo por amar
la libertad. Ignoro
dónde vive, qué lengua
habla, de qué color
tiene la piel, cómo
se llama, pero
en este mismo instante,
cuando tus ojos leen
mi pequeño poema,
ese hombre existe, grita,
se puede oír su llanto
de animal acosado,
mientras muerde sus labios
para no denunciar
a los amigos. ¿Oyes?
Un hombre solo
grita maniatado, existe
en algún sitio. ¿He dicho solo?
¿No sientes, como yo,
el dolor de su cuerpo
repetido en el tuyo?
¿No te mana la sangre
bajo los golpes ciegos?
Nadie está solo. Ahora,
en este mismo instante,
también a ti y a mí
nos tienen maniatados.

Al final vamos todos en el mismo barco...